Previo de altas prestaciones con DAC integrado y un excelente combo DAC/AMP de alta fidelidad para auriculares.
Construcción.
Lehmann Audio, fundada en 1988 por Norbert Lehmann en Colonia, Alemania, es una empresa especializada en equipos de alta fidelidad de muy alto nivel. Siempre buscando la utilización de los mejores componentes del mercado para dar al cliente, nosotros, la mayor calidad posible en sus productos. En esta ocasión, cortesía de Werner (La tienda de audio con más historia de Barcelona), tenemos la oportunidad de dar un vistazo a un Lehmann Audio Linear USB II, un combo de DAC y AMP que funciona tanto para auriculares como previo para altavoces activos u otros equipos de audio.
El Lehmann Audio Linear USB II tiene una construcción sólida y un diseño sencillo, pero no nos dejemos engañar por ello. Se trata de un equipo con muy altas prestaciones. Se presenta en un cuerpo metálico de color negro, de forma rectangular. La parte trasera aloja las conexiones USB, de corriente y RCA. Mientras, el frontal presenta una placa, en mi caso, de color plata con el logo de la marca, un LED para indicar el estado, 2 salidas para auriculares y 1 control de nivel de las salidas. Las placas frontales están disponibles también en color negro y cromado. Las 2 salidas para auriculares son excelentes si quieres compartir tu música o, en mi caso, comparar modelos de auriculares entre ellos.
El control de volumen se presenta como la pieza principal, dado su tamaño, tiene un acabado y tacto agradable al uso y es muy preciso, al utilizarlo no os cabrá duda que se ha utilizado un componente de alta calidad para el mismo. En la parte inferior tres sólidos pies permiten situar al Lehmann sin temor a que se tambalee o se deslice. Los mismos también sirven para desacoplar el equipo de su base, eliminando ruidos. Adicionalmente es aquí dónde se sitúan los interruptores para modificar la ganancia de salida.
Sin embargo, los elementos más sorprendentes se encuentran en el interior, donde sólo se utilizan componentes de la más alta calidad, como Mundorf y Mica, así como los conectores Neutrik para las salidas de auriculares. La conexión USB, por otro lado, es capaz de manejar samples de 384 kilohertz/32 bits. El Linear USB II utiliza los afamados chips ESS Sabre K2M. Por cierto, el potenciómetro del control de volumen, con su excelente tacto y funcionamiento, es ALPS. ¿No les dije que se trataba de un equipo con los mejores componentes?
El funcionamiento tampoco podría ser más sencillo, el Lehmann detecta automáticamente la entrada, por lo que si conectamos un cable USB se activa directamente el mismo como input, si lo desconectamos, cambia a la entrada analógica. En mi MacBook Pro, no fue necesario instalar ningún tipo de controlador, fue plug & play.
Sonido.
El Linear USB II suena, y suena muy bien. Tiene un perfil de sonido muy balanceado y amplio. Para esta review únicamente lo utilicé como DAC/AMP para auriculares, aunque como he mencionado anteriormente, puede ser utilizado también como previo para equipos de amplificación, gracias a las conexiones en su parte posterior.
Para la prueba, utilicé el Lehmann conectado a mi ordenador mediante un cable USB de altas prestaciones, el Callisto de Final Touch Audio. El cable de corriente estándar y unos auriculares Audio-Technica ADX5000, también con el cable estándar. La fuente fue un ordenador MacBook Pro con Apple Music, siempre en formato Lossless y a la mayor resolución posible.
Con la ganancia ajustada a mi gusto, conecté los Audio-Technica ADX5000 a la salida frontal y puse el control de volumen apenas por encima del límite inferior y preparé los temas musicales que había seleccionado para esta reseña.
Primero escuché Hermanos Gutiérrez - El Bueno y el Malo (2022). Un excelente disco del dúo, que nos presentan una completa historia al más puro estilo western con sus lap steel y guitarras en una grabación sorprendente. El tema que da nombre al álbum, El bueno y el Malo, sonó hipnótico a través del Lehmann. Aún a una ganancia de 0dB, el Linear no tuvo problema en dar suficiente potencia a los Audio-Technica y, haciendo buen uso de la capacidad de resolución de los mismos, les facilitó toda la resolución de la que es capaz para que los mismos sonaran a su máxima expresión. Aquí tengo que decir una cosa muy importante y es que, al menos para mi, el mejor DAC es el DAC que no se escucha. Pero sobre esto me explicaré más a fondo en las conclusiones. Sólo diré, que el DAC en el Lehmann entra, de lleno, en esta categoría. Thunderbird, un tema con un poco más de brío nos traslada nuevamente a ese escenario que bien podríamos identificar con cualquier película del género en su apogeo. Es difícil describir la calidad que es perceptible a través de la cadena de reproducción con el equipo que utilicé para esta reseña, pero es que es eso. Calidad, pura y dura. Una transparencia y ausencia de coloraciones que, curiosamente, lo que logran es transmitir la mayor pureza en la música que escuchamos. Los detalles que se hacen evidentes en la grabación, un pequeño golpe con el dedo, la vibración de las cuerdas, un pequeño movimiento de los artistas, la reverberación y caída del sonido.
A continuación escuché Miles Davis - Agartha (1975). El Preludio 1, con sus 26 minutos de duración y cargado de una energía Funk fue alucinante. Nuevamente el Lehmann prestó la más cristalina óptica a los Audio Technica a efectos de reproducir el festival de sonido que la agrupación y el propio Davis generaron para esta grabación. Un escenario amplísimo. Incluso los más estridentes sonidos eléctricos propios de esta etapa de experimentación para Miles, suenan como parte de la representación y no como elementos fríos y aislados. La musicalidad que transmite el Lehmann integró todos los excéntricos sonidos de un Miles en busca de algo desconocido y me permitió apreciarlos como lo que son, un conjunto y desarrollo musical sin precedentes.
Gladys Knight & The Pips - I heard it through the grapevine. Una grabación de menor calidad a las que había utilizado anteriormente pero, igualmente, relevante. La voz de Knight se transmitió con todas sus texturas y potencia. La escena, aunque limitada por la grabación, se presentó suficientemente definida, con una separación de canales bien delimitada. Aquí brillan las capacidades técnicas del equipo, pues hace que un buen tema, con una grabación relativamente pobre, sea presentada con su mejor cara. Gracias a este equipo es posible disfrutar de la música que ha sufrido en su tratamiento por el paso del tiempo o por medios impropios de almacenamiento y tratamiento en su conservación.
Tema tras tema y estilo musical tras estilo musical resultó evidente que el Lehmann aportaba, sobradamente, la mayor resolución posible a los auriculares que se conectaban al mismo. Utilicé los Audio-Technica como referencia, pero también lo probé con unos Hifiman, unos Meze, otros Audio-Technica, unos Final e, incluso, con algún IEM. A todos y cada uno de ellos, el Lehmann les permitió rendir su máximo potencial, a la vez que ampliaba su capacidad de rescatar detalles y amplitud en la escena musical.
Datos técnicos.
Impedancia de entrada | 47 Ohms |
Ganancia | 0 dB, 10 dB, 18 dB, 20 dB, selección mediante interruptor |
Frecuencia de respuesta | 10-Hz a 35 kHz |
Ratio de señal y ruido | >100 dB a 0dB de ganancia |
Distorsión armónica total | <0.001% a 6 mW/300 ohms |
Separación de canales | >80 dB a 10 kHz |
Potencia de salida | 400 mW/60 ohms - 200 mW/300 ohms |
Impedancia de salida | salida previo 50 ohms, auriculares 5 ohms |
Conectores de audio | Jacks Neutrik con contactos chapados en oro, conectores RCA aislados con teflón y chapados en oro. |
Consumo | 15W, fuente de poder interna regulada |
Conclusiones.
En el apartado de sonido dije que, a mi parecer, el mejor DAC es el que parece no existir. Sobre esto ampliaré mi comentario. La función de un DAC es, sencillamente, traducir una señal digital a una analógica. La cuestión es, como realiza esta función. Lehmann parece haber dado con la clave. Han utilizado un chip DAC de altísimas prestaciones y, respetando esto, han utilizado un modelo de implementación excepcional, complementando el equipo con los componentes de más alta calidad. Esto, es hacer las cosas como es debido. El Linear USB II es un equipo para toda la vida. Su calidad de construcción y prestaciones lo avalan.
Otorga gran definición y amplísima escena, la facilidad de adaptar la salida a los auriculares que tengamos, sin importar su impedancia y, además presenta una construcción sumamente sólida. ¿Qué no nos va a gustar de este equipo?
Si tuviera que citar un ejemplo para apreciar las prestaciones del Lehman, me pareció el equivalente de aquel antiguo anuncio que aparecía cuando se miraba una película en la TV hace ya varios años.
"The following film has been modified from its original version. It has been formatted to fit this screen."
Rezaban las pantallas cuando iba a comenzar una película, haciendo alusión a la disposición de 1:33 de las televisiones "cuadradas" de antaño, vs el 2.35 o 2.77 de las pantallas de cine. ¿Esto que tiene que ver dirán? Información, la pérdida de información.
El Linear USB II es como la pantalla de cine, nos muestra más información. Nos permite recibir todo lo que, quien creó, produjo y grabó la música, quiso que recibiéramos al escucharla.
Por otro lado, hay que recordar que, aunque el DAC del Lehmann es bastante competente, la sección de amplificación también lo es y que, en el caso de alguien que ya cuenta con un buen DAC independiente o integrado, Lehmann Audio ofrece el Linear, la versión que realiza solo amplificación de este equipo.
Y es que el solo amplificador es también excepcional. La ganancia ajustable permite mover casi cualquier par de auriculares en el mercado. Nos permite conectar 2 auriculares a la vez para trabajo de monitorización o para comparativas A/B y, al igual que el Linear USB II, hace todo esto con componentes de la más alta calidad. El perfil de sonido es bastante claro y neutral, sin coloraciones innecesarias, como pude comprobar utilizando el Linear USB II con un DAC externo, por lo que no degrada ni afecta la calidad de la fuente a amplificar. Todo lo anterior garantiza la mayor claridad en la reproducción. El Linear, dado que prescinde del DAC, también tiene un precio inferior.
Recomiendo que, quien aún tenga dudas, se acerque a Werner y pruebe, seguro que sale con un Lehmann Audio bajo el brazo y una sonrisa de oreja a oreja. Lo primero por la calidad del producto, lo segundo por el excelente trato de Werner.
Dónde comprar.
Si queréis comprar este equipo, así como mirar las demás ofertas de la marca, todos están disponibles en la web del distribuidor para España, Werner.
El modelo reseñado (DAC + Amp) tiene un coste de €2.000,00 al momento de la publicación.
El modelo Linear (solo amplificación), un coste de €911 a €1.011,00, dependiendo del acabado de la placa frontal.
Galería.
